
Ser la víctima de un accidente de tráfico es una experiencia difícil que puede dejar secuelas físicas, emocionales y económicas. Ante esta situación, muchas personas afectadas desconocen que tienen derecho a reclamar una indemnización.
Este derecho está reconocido legalmente y busca compensar los daños sufridos como consecuencia del accidente. Por ello, en este artículo te explicamos quién puede reclamar, qué plazos existen y qué debes hacer para ejercer este derecho con éxito.
¿Quién puede reclamar una indemnización por accidente de tráfico?
Tanto si se ha producido un daño material como personal, tienen derecho a reclamar indemnización todas aquellas personas que hayan resultado perjudicadas en un accidente de circulación, siempre que no sean responsables directos del mismo. A continuación, detallamos los perfiles que pueden iniciar una reclamación:
Conductores no culpables
Si conducías un vehículo y el accidente fue provocado por otro conductor, puedes reclamar por los daños personales y materiales sufridos.
Ocupantes de cualquier vehículo
La ley protege a los ocupantes como terceros afectados. Esto significa que tendrás derecho a una indemnización por accidente de tráfico si eras ocupante del vehículo que ha recibido el daño o del que lo ha causado (salvo el conductor).
Peatones y ciclistas atropellados
En caso de atropello, el peatón o ciclista puede exigir una indemnización al seguro del vehículo que provocó el accidente, siempre que no haya imprudencia grave por su parte.
Familiares de víctimas fallecidas
Si el accidente ha causado la muerte de un ser querido, los familiares directos pueden solicitar una indemnización por fallecimiento, incluyendo los gastos derivados y el perjuicio moral.
Por otra parte, cuando se ha producido el daño a una persona, y como reza el artículo 1.1 de la Ley sobre responsabilidad y seguro en la circulación de vehículos a motor, el conductor responsable solo quedará exento de responsabilidad si demuestra que los daños fueron ocasionados debidos a la culpa exclusiva del perjudicado, o cuando el accidente se haya producido por causa de fuerza mayor ajena a la conducción o al funcionamiento del vehículo.
Al mismo tiempo, puede haber una concurrencia de culpas, es decir, cuando el perjudicado por el accidente de tráfico también ha contribuido a que se produjera dicho accidente, o bien a agravar las consecuencias materiales o personales del mismo. En este caso, la indemnización que recibirá será menor, entre un 25% y un 75% menos, que si la culpa hubiera sido exclusiva del otro conductor.
Pasos para reclamar una indemnización de tráfico
Reclamar una indemnización por accidente de tráfico implica seguir un proceso ordenado y respaldado por documentación. Estos son los pasos más importantes.
1. Declaración amistosa o atestado policial
Esto corresponde al momento justo después de sufrir el accidente. Idealmente, responsable y víctima deberían realizar un parte amistoso, pero en la práctica no siempre se produce así.
Por ejemplo, hay casos en los que los implicados necesitan ser atendidos médicamente, in situ o en el hospital, lo que impide realizar el parte amistoso inmediatamente tras el accidente. O puede ocurrir que no haya acuerdo entre las partes, que una parte se niegue a firmarlo, que no se disponga del parte o que, directamente, el responsable se dé a la fuga.
Ante esta situación, hay que llamar a la policía para que redacte el atestado del accidente. Pero también hay que llamarla si se producen lesiones personales, las cuales irán incluidas en el atestado policial, el documento que dará fe de todo lo ocurrido en el hipotético proceso judicial.
Una vez la víctima tenga los datos del conductor responsable (nombre, matrícula, aseguradora), y tanto si se cuenta con el parte amistoso como con el atestado de la policía, la persona debe acudir a urgencias en las próximas 72 horas, para que sea atendida y reciba los partes médicos que demuestren la gravedad de las lesiones.
Este proceso puede ser al revés, cuando la víctima es llevada de urgencia al hospital y más tarde la policía se pone en contacto con ella para comunicarle toda la información sobre el accidente.
2. Enviar la documentación a la aseguradora
El segundo paso es reunir toda la documentación de que dispongas para enviarla a la aseguradora de la persona responsable del accidente. Concretamente, necesitarás:
- Parte amistoso o atestado policial
- Pruebas gráficas (fotos del vehículo, de las lesiones y del lugar del accidente)
- Posibles testimonios de testigos
- Informes médicos y de rehabilitación
- Gastos relacionados con el accidente, como factura de reparación del vehículo o de objetos que quedaron inservibles en él
- Documento con los días que se ha estado de baja y cuánto se ha cobrado de menos, si procede
3. Reclama al seguro responsable
Como decimos, y lógicamente, la reclamación debe presentarse ante la aseguradora del conductor responsable. Por ley, la compañía tiene tres meses para darte una respuesta mediante una oferta motivada o bien una respuesta motivada, que es el rechazo al pago de una indemnización.
Los motivos que pueden llevar a la aseguradora a emitir una respuesta motivada son, tras el análisis: 1) que no se produjo accidente alguno, 2) que la responsabilidad no fue de su asegurado, 3) que no hubo ningún perjudicado, 4) que no hay relación entre el accidente y los daños o 5) que no han podido valorar la gravedad o el alcance de los daños.
En cualquier caso, si transcurren los tres meses desde que recibió la documentación facilitada por la víctima del accidente, y la aseguradora no se ha puesto en contacto con ella, la compañía incurrirá en intereses de demora, los cuales deberán añadirse a la supuesta indemnización.
4. Responder a la oferta o la respuesta motivada de la aseguradora
No hay que olvidar que las aseguradoras no dejan de ser empresas. Es decir, en caso de aceptar el pago de una indemnización, siempre ofrecerán una cantidad inferior a la que se debería cobrar, según el caso.
Hay que saber, no obstante, que se puede aceptar la cantidad inicial ofrecida por la aseguradora y seguir reclamándole el resto. En una situación así, pueden darse dos escenarios:
- Que la aseguradora se niegue a pagar la parte restante y haya que ir a juicio. Esto ocurre cuando la compañía tiene argumentos legales sólidos para negarse a seguir pagando.
- Que la aseguradora termine cediendo y pagando la parte restante. A veces, ante la insistencia de la víctima, y si la compañía considera que sus probabilidades de ganar el juicio son bajas o nulas, prefieren pagar lo solicitado para evitar el proceso judicial.
Por otra parte, si la víctima recibe una respuesta motivada, es decir, el rechazo de la compañía a indemnizarla, no quedará más opción que acudir a juicio con la ayuda de un abogado.
5. Recurrir la sentencia, si llega el caso
Si, ante una respuesta motivada, se ha ido a juicio en contra de la aseguradora y no estamos a favor de la sentencia, podemos recurrirla en un plazo de 20 días desde la notificación de la resolución judicial.
Esto tiene un límite, y es que no es posible recurrir la sentencia si la indemnización reclamada es inferior a los 3000 €.
¿Qué plazo existe para presentar la reclamación?
El plazo general para reclamar una indemnización por accidente de tráfico es de un año, aunque este periodo tiene particularidades que conviene conocer.
Dicho esto, lo cierto es que la ley no establece a partir de qué momento empieza a contar el año para pedir la indemnización por accidente de tráfico. Sí podemos decir que la solicitud de la indemnización debe hacerse una vez recibida el alta, ya que solo entonces se podrán valorar correctamente las secuelas, además de las lesiones temporales.
Si dejas pasar el plazo legal sin presentar la reclamación, podrías perder el derecho a indemnización. Por eso es importante actuar con rapidez, asesorarse legalmente y conservar todos los documentos que acrediten el daño sufrido.
El papel de AELD, asociación de víctimas de accidentes de tráfico
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